Construyendo nuevos proyectos.

LEGO.

UNA AVENTURA DE MUCHOS HÉROES.

Saludos mi querido público de todos y ninguno, aquí nuevamente con esta publicación que me nació hacer durante una tarde de frío, y que dio surgimiento a un nuevo proyecto en este espacio. Me es grato informarles que después de tantos escritos, análisis y pensamientos, desde los temas más recónditos hasta los más conocidos, desde caricaturas como My Little Pony y Yu-gi-oh, hasta temas reflexivos acerca del poder humano y orígenes del mundo, he decidido realizar una serie de análisis acerca de películas que en cuyo momento causaron gran impacto, y que hasta nuestros días, la universalidad en cuanto a sus diversos contenidos, nos sigue sorprendiendo. Esto lo hago con varios objetivos, pero principalmente, como en todo, el de ir aprendiendo más cosas acerca de otros tipos de literatura, y otros significados que se pueden apreciar visualmente. Últimamente, me he visto asaltado por la duda, como todo ser humano, si realmente no sólo soy un chico cualquiera que se retuerce frecuentemente en el pasado, impidiéndose a sí mismo avanzar, porque cuando me propuse a hacer este blog, me decidí llenarlo con todo aquello que me gustara y que yo percibiera como merecedor de ser contado; cuando reviso el blog, y veo todo lo que llevo hecho, me pongo a pensar acerca de una única constante: un hombre enalteciendo los años dorados de su juventud, por medio de sus tan amadas caricaturas. Me miro a mí mismo actualmente, a mis veintiún años, un hombre sin trabajo, y que vive la mayoría de su tiempo atrincherado en su habitación, escribiendo sobre mundos fantásticos; siento hervir mi sangre al creer que peco de soberbia al mirar atrás una y otra vez, queriendo recuperar una esencia que me parece perdida. Fue cuando comprendí, en mi inocencia, que el presente lo conforma tanto el pasado como el futuro, ya que es uno el que decide cómo definir el triunfo en su vivir. Quiero decir, que ya me lo habían enseñado, pero no cobró un significado de tal importancia hasta que lo viví yo mismo. Es cierto, no tengo trabajo, pero…no me siento un fracasado, ni en el pasado, ni ahora mismo. Quizás no sepa lo que es ser parte de una jornada laboral seria, o un sistema de tiempo dividido por actividades específicas…pero sé lo que se siente ser triunfador, cuando puedo ver a los ojos a mi madre, y transmitirle todo el amor que necesita para seguir viviendo; me siento triunfador cuando puedo ver a mi propio reflejo en los ojos de mi novia durante interminables besos; me siento triunfador cuando puedo disfrutar con cada palabra escrita, y seguir sorprendiéndome al ir aprendiendo más cosas. Si, me siento triunfador, y al haber superado la duda antes dicha, lo disfruto todavía más. Así que aclarado esto, una vez más, una de tantas veces en el aquí y el ahora, diré que otro de mis objetivos, es que seguiré ejercitando mi capacidad analítica, para aprender sobre nuevas perspectivas, nuevos significados, y quizá, de ser posible, incitar el debate con algunos interesados sobre los temas que iré planteando aquí.

Ahora, para arrancar con esta gran empresa, no encuentro un tema más adecuado, que el propuesto en la película sobre la gran aventura de Lego, gran invención distribuida por Warner Bros Pictures y dirigida por Phil Lord y Christoper Miller.

La historia nos relata las andanzas de Emmet, un joven constructor tratando de encajar en un mundo controlado, literalmente, pieza por pieza. Luego de una serie de eventos inesperados, este personaje tendrá que encontrar en su interior la confianza para poder fungir su rol como elegido de esta aventura, e impedir la completa congelación del universo, con la ayuda de otros personajes en búsqueda de esa fuerza interior que les permitirá romper esquemas, y vivir en libertad.

¿Qué es lo que tiene Lego, que me llamó tanto la atención?, pues, ¡tiene de todo!, destalles sublimes sobre artística en la animación, personajes entrañables e identificables, situaciones con temáticas profundas que no cualquiera puede captar, símbolos arquetípicos empleados humorísticamente, y rasgos que denotan la actitud y personalidad de cada elemento en la trama. Pero repasaremos esta argumentación paso a paso, basándonos en el buen Joseph Campbell, y además sacar conclusiones propias en cuanto a mensajes ocultos.

En su inicio, la película nos plantea un excelente arco argumental, iniciando con una profecía y un plan maquiavélico, los cuales, serán elementos recurrentes e impecablemente empleados durante el resto de la historia, sin dejar de lado los toques artesanales propios en el estilo de la película. Una vez que la carrera contra el tiempo es puesta en marcha, se aborda el mundo normal del protagonista, el constructor de nombre Emmet, y se plantea a través de una pegadiza canción, que versa sobre las maravillas de la unión y el trabajo en equipo, siguiendo siempre las dichosas instrucciones; he ahí un guiño interesante para todos aquellos niños que jugaron con estas piezas en su juventud, porque para mí, los instructivos no eran otra cosa que una guía preliminar, bocetos, meras recomendaciones, que te invitaban a imaginar otras cosas, ya que el crear por ti mismo era el verdadero punto del juego. Con el protagonista se maneja magistralmente, la situación por la que pasan muchos héroes de diversas historias, sobre el tratar de encajar, el tratar de pertenecer al status quo establecido por el imperio que oprime el universo, porque mientras más trata de hacerlo, más es evidente que ese no es su lugar, o que le espera algo mucho más grande. Emmet personifica, de manera hilarante, el arquetipo del héroe en su momento de dudas, pero aunque represente un concepto, te enamoras del personaje, o al menos así fue para mí, al identificarme mucho con él, y más porque maneja mucho este tema de la falta de confianza, del preguntarse qué hago aquí y hacia dónde me dirijo, y cómo precisamente pasar por estas dudas lo van preparando.

La llamada a la aventura se maneja igual de manera espléndida, no sólo por la introducción de varios personajes, desde Lucy alias Estilo Libre hasta Vitruvius, sino por la increíble escena de persecución que representa sin lugar a dudas esta manera en cómo el mundo ordinario reprime a aquello que deciden pensar distinto a lo establecido, y tal detalle será llevado durante toda la narrativa. Desde el primer momento en que vemos a Emmet tratando de rechazar su actual condición de elegido, hasta su práctico secuestro hacia el mundo mágico, y los otros reinos existentes, nos damos cuenta por el modelo actancial de Greimas, que nos habla de un sujeto en busca de un objeto de deseo, de que tal elemento no es otro que el mismo maestro del constructor, Vitruvius; por unos instantes, desde el inicio del filme, me debatí seriamente si el sujeto podría ser éste o el villano Señor Negocios, pero la diferencia se establece en el instante donde el maestro profiere la profecía acerca del elegido, buscando la liberación de todos los mundos, y sólo podría conseguirse frustrando la súper-arma del antagonista. Siguiendo esta misma línea, con la jornada del héroe a un lado, tanto el Señor Negocios como el policía malo, fungen como guardianes, y opositores directos para evitar la liberación del héroe, y el súper-objetivo de los protagonistas.

La película también plantea este detalle en el monomito, donde el héroe no está preparado para lidiar con determinadas pruebas, y eso provoca malestar no sólo en el protagonista, sino en todos a su alrededor, ya que las consecuencias de sus errores suelen ser equivalentes a la supuesta grandeza del elegido; no por el hecho de que Emmet, tuviera algunas aptitudes como maestro constructor, implica que pudiera superar todos los obstáculos que se le presenten, y tal se ve en el momento de la reunión de todos los maestros constructores. El concepto de maestro constructor también es utilizado de manera soberbia simbólicamente hablando, interpretando que el hecho de usar todas estas figuras como superhéroes, artistas, deportistas, y demás personajes de ficción, es el cómo las personas tenemos la habilidad de crear cosas maravillosas, y se liga directamente a porqué la utilización de piezas lego, diciéndonos, a mi parecer igual, que no importa las piezas que tengas, sino cómo las usas, que traducido a la vida diaria, no importa qué recursos tengas, sino cómo los distribuyes para hacer cosas extraordinarias; personajes como Gandalf, Dumbledore, Superman, Linterna Verde, provienen de historias dentro de la psique humana, que representan esta universalidad del ser humano en toda situación, ¡resaltan aspectos de nosotros mismos!, y son claros ejemplos de todo lo antes dicho. Al final de la misma escena, donde tal reunión se ve frustrada, ocurre algo muy interesante en el momento donde se está creando el submarino; ¿por qué en un primer momento nos hablan de la unión, y después nos hablan acerca de la división?, pues bien, en cuanto a la narrativa, como dije antes, esa unión resaltaba mucho al héroe queriendo encajar, y cómo no podía hacerlo al no pertenecer ahí, pero también mostraba este lado de que el romper esquemas traía consecuencias graves siendo este universo controlado por la opresión. Existen puntos a favor y en contra, y creo que todo radica tanto en las motivaciones como en los objetivos a alcanzar; sé que puede parecer complicado, pero denoto el concepto de División como el destinador de la narrativa, ya que es lo que motiva a Vitruvius a alzarse contra la opresión, y crear la profecía del elegido, siendo la Unión el destinatario, siendo la liberación de los reinos en conjunto quienes se beneficiaban del éxito de tal empresa. Considero que Emmet en ningún instante anterior al debido, pudo haber encajado en un equipo como lo hizo con los maestros constructores, porque finalmente al haber salido de los esquemas controlados de su mundo normal, finalmente estaba con sus “iguales”, pero logrando el justo equilibrio de enseñarles a trabajar en equipo, hacia un objetivo mayor; caso contrario como vemos al principio, siendo este trabajo en equipo no producto de la verdadera unidad, o de una verdadera decisión consciente, sino porque eran las órdenes que había que cumplir.

En la recta final, encontramos estas similitudes en los polos opuestos que terminan siendo el Señor Negocios y Emmet, a raíz de la confesión de Vitruvius, en un evidente momento de disyunción, revelando que la profecía no era más que una invención, lo que hace perder a Emmet total esperanza. En la captura de los héroes, el villano igual confiesa su inquietud ante la verdad de que nadie nunca le ha dicho que él es especial en algo, y eso se ve tanto en la apariencia del personaje al portar su traje con grandes zancos, que representan esta necesidad de mostrarse más que los demás, y el porqué utiliza artilugios que no son propias piezas de Lego, para tanto asombrar como atemorizar a los otros. En sí, el personaje no es malvado, sino con un terrible complejo de auto-engrandecimiento, proyectado en esta misión de dar orden al caos, a todo el arte hecho por los maestros constructores, originario de esta frustración de no sentirse capaz de construir ese tipo de cosas por él mismo. Llego a notar no sólo un reflejo, sino un enfrentamiento con el mismo, esa parte de padre destructor porque si ese tipo no siendo especial provoca tanto daño, Emmet puede llegar a sentir ese temor de caer en lo mismo.

Después de aquello, se manejan los momentos que, para mí, son los más importantes dentro de toda la historia. Vitruvius regresa de la muerte, y le confiesa a Emmet que inventó la profecía porque sabía que aquel que adquiriera la pieza de resistencia, se convertiría en el elegido, ya que lo único que necesita una persona para serlo, es creer en sí mismo, por el simple hecho de que aunque eso se maneje mucho en la tan criticada retórica de la superación personal, no le quita mayor verdad, porque nos da a entender a todos ese mensaje tan bello de cómo todos nosotros tenemos el potencial para cambiar las cosas. Si pensamos en todas estas profecías de elegidos o salvadores, vemos que tales palabras son aplicables a cualquier persona, porque todos tenemos el potencial heroico de hacer hazañas extraordinarias, de crear cosas increíbles, o como dice Estilo Libre, el potencial latente de romper esquemas, cosa que da entender de igual manera la Jornada del Héroe, al considerar no sólo a un personaje, sino a todos los que conforman la historia al ser que libran sus propios cambios y sus propios caminos. Esta realidad se plasma en el momento donde Lucy, dirige a las personas del reino natal de Emmet, para que construyan cosas y luchen contra las fuerzas del Señor Negocios. Y la frase de la película se lo lleva este personaje al decir: “Hoy no se conocerá como el martes de tacos…se conocerá como el viernes de libertad… ¡y no nos importa que sea martes!”. Me mató de risa completamente, pero igual sostiene esa peculiar frase mía, que versa así: Ser superhéroe es demostrar que todos son superhéroes.

El otro momento que me impactó completamente, fue el revelar que todos los acontecimientos sucedidos en la historia y en los diferentes reinos de Lego, son en realidad un juego utilizado por un niño, mismo quien desarrolló la trama en primer lugar. El niño estaba reflejando su sentir en cuanto a la opresión de su padre al prohibirle jugar con todos los lego que conformaban una enorme maqueta, que el señor utilizaba con fines corporativos. Esta parte me gustó mucho porque es una demostración clara de mi teoría acerca de cómo estas energías conformadoras del universo, no son otra cosa que nosotros mismos, y que las tenemos siempre muy cerca de nosotros, sin importar en qué situación nos encontremos, y esto se ve casi llegando al final en cómo Emmet termina reflejando la libertad del niño, y el Señor Negocios la opresión del papá. El encuentro decisivo, el clímax de la historia, se presenta a manera de un choque de discursos ideológicos, muy bien construidos, que hablan acerca de la libertad y la unión, pero sobre todo, esta parte de que todos tenemos el potencial para cambiarlo todo. La conjunción se da cuando el padre comprende a su hijo, y por consiguiente, el Señor Negocios decide detener sus planes, dejando esta figura de auto-engrandecimiento, y sellando él mismo la súper-arma, y liberando a todos los mundos de una división impuesta.

Espero les haya parecido interesante este pequeño análisis que decidí plantear acerca de una de mis películas favoritas en todo el mundo, y con ello, doy inicio al proyecto titulado: “JORNADA DE TODOS LOS HÉROES”. Que les vaya bien en sus respectivos caminos, y hasta los próximos análisis que realizaré. Gracias por su atención.

Como siempre, ninguna de las imágenes me pertenece.

Su uso es con fines de entretenimiento y enseñanza.

Muchas gracias por su atención.